domingo, 22 de abril de 2012

HERMOSA PARADOJA



Desde que me recibí de fonoaudióloga hace veintinueve años, he tenido la oportunidad de atender a gran cantidad de personas con diferentes grados de pérdida auditiva (hipoacusia), especialmente niños.
Tengo claro que el objetivo primario en el tratamiento del paciente hipoacúsico severo o profundo “equipado”, no es únicamente hablar sino también, y mucho más importante, enseñarle a escuchar de alguna manera...

Inmensa ha sido mi alegría con el paso de los años al comprobar un hecho llamativo: Muchos de ellos resultaron ser amantes de la música y la disfrutan plenamente de diferentes maneras.

_Inés, anacúsica de un oído y con hipoacusia moderada a severa en el otro, hizo su monografía de bachiller investigando sobre la relación entre la hipoacusia y la música, dado el especial gusto que tiene por la misma.

_Andreina, practicó la gimnasia rítmica al son de hermosas melodías, moviendo su cuerpo con una gracia exquisita.

_Mercedes le pidió a su mamá que la llevara a una academia a aprender ballet.  

_Juanchi es un apasionado de la música y en facebook siempre pone frases de canciones que le “llegan”.

_Valeria baila danzas folklóricas y tango y ha participado en campeonatos regionales.


_ Gonchi  pone música en el celular, se la acerca al oído y tararea atentamente las melodías al tiempo que mueve su cuerpito llevando el ritmo de la canción y repitiendo lo que logra entender.
 
_Sebastián, Darío, Rodrigo, Danna, Valentina, Julieta, Facundo, Federico, Nacho, Mariana, Stephanie, Pedro, Enzo, Ma. Emilia, entre muchos otros, hoy lindos jóvenes entre 15 y 25 años aproximadamente, se reúnen frecuentemente a bailar, dejando que las notas unidas en atractivas melodías ingresen a sus cuerpos por donde puedan y cómo puedan, logrando así hacerlos mover sus cuerpos y disfrutar de esa hermosa sensación.


¡Linda paradoja! Mis amigos hipoacúsicos aman una expresión artística que se asocia directamente con la audición, sentido que les falta o tienen en menos pero…que aprendieron a compensar de otras maneras: oyendo con el cuerpo y con el corazón. 

Estudios de investigación de D. Shibata (han demostrado que a los hipoacúsicos se les activa la misma zona cortical que a los oyentes: el “córtex de audición”, cuando se enfrentan al estímulo musical. Esto les permite disfrutar de los ritmos y vibraciones que les producen placer así como los ayuda a comprender mejor el mundo, incluso disminuyendo sus miedos. Por eso es recomendable enfrentar desde pequeños a los niños con déficit auditivo a la experiencia musical.

artículo interesante: http://youtu.be/FmXzp_3nADc






LA LLAMAN: MÚSICA PARA SORDOS:

lunes, 2 de abril de 2012

Globos azules

AUTénticos, pAUTados, cAUTivantes...AUTISTAS



"Cada vez que me mira a los ojos y sonríe...nos reconocemos. Siento que fugazmente , pero cada día un poquito más, soy parte de su mundo".


"Abre la compuerta de su cápsula...me deja entrar por un instante...disfrutamos del encuentro".

Eli


Les propongo esto:

A
cerquémonos a ellos

Unamos nuestras fuerzas

T
rabajemos a su lado

Incidamos en sus vidas

Sintamos sus necesidades

Mostrémoles nuestro amor

Obviemos los prejuicios